NO al abuso sexual hacia los niños y niñas

El 19 de noviembre es el Día Mundial para la Prevención del Abuso Infantil, fue en el año 2000 que se conmemoró por primera vez este día para hacer conciencia sobre los abusos que sufren los niños dentro y fuera de sus hogares. Tristemente, la violencia sexual es la peor forma de dañar a un niño o niña porque las heridas que deja son muy profundas e incluso a veces irreparables. 

El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) informa que 1 de cada 10 niñas en el mundo menores de 20 años reporta haber sido forzada a mantener relaciones sexuales u otro tipo de acto sexual en su vida, sobre el abuso hacia los niños el único dato que se tiene es de hace 20 años cuando la OMS estimaba que 73 millones de niños menores de 18 años experimentaron relaciones sexuales forzadas.

Las verdaderas cifras sobre la violencia sexual hacia las niñas y niños son difíciles de conocer, pues en la mayoría de los casos no existe denuncia para evitar el señalamiento hacia la niña o niño y su familia, por miedo a represalias, por culpa, por falta de confianza hacia las autoridades, y porque tristemente aún hay quienes se niegan aceptar que sus hijos o hijas sufren de abuso sexual, prefieren ignorarlo u ocultarlo.

Un abuso “invisible”

Jeni Haynes es una mujer australiana de 50 años de edad, que el año pasado subió al estrado para buscar justicia ante el abuso sexual y tortura que sufrió por parte de su padre cuando era niña, hasta ahora ha sido el peor caso de violencia sexual del que se tiene registro en Australia. El abuso fue tan persistente y horrible que Jeni creó 2,500 personalidades para sobrevivir.

El caso de Jeni es el único del que se tiene registró en el mundo, donde una víctima con un trastorno de identidad disociativo ha testificado con sus otras personalidades, logrando condenar al culpable. Ella denunció el abuso en 2009, pero la investigación policiaca tardó 10 años y fue hasta 2019 que Richard Haynes enfrentó 367 cargos y fue sentenciado a 45 años de cárcel.

El hecho de que el abuso sexual ocurra en el propio hogar y sea realizado por una persona cercana, y que la víctima sea sienta culpable y reciba amenazas, son algunos de los factores que contribuyen a esconder los casos de violencia sexual.

Tristemente, los casos de abuso sexual infantil son muy comunes en todo el mundo, pero los registros que se tienen de este delito son tan bajos que hace imposible visibilizar la realidad que viven millones de niños y niñas.

Un niño pequeño no sabe lo qué es el abuso y probablemente tarde mucho tiempo en contarle a un adulto lo que ha sufrido por parte de su agresor o quizá nunca lo haga por miedo, vergüenza o porque siente culpa. Sin embargo, aunque la denuncia tarde, el trauma generado por el abuso lo llevará por el resto de su vida y eso podría desencadenar problemas de autoestima, depresión, intento de suicidio, problemas de conducta, adicción a sustancias nocivas para la salud, problemas sexuales, etcétera. 

Cuando un niño sufre de abuso sexual le es muy difícil compartirlo con alguien, con frecuencia prefiere guardar silencio, pero cuando decide contarlo está diciendo la verdad y necesita que crean en él, por ello buscará acercarse a alguien que le brinde confianza y seguridad. Es muy importante escuchar y creer todo lo que diga el niño, como adultos deben ser capaces de ser empáticos y brindar acompañamiento, quizá en un principio parezca un invento, pero deben ser conscientes que un niño nunca mentirá sobre el abuso sexual o de algo que lo lastima tan profundamente, aunque no sea visible el daño físico, el daño emocional es muy grande y devastador. 

Escucha su voz y ayúdalos

• México ocupa los primeros lugares a nivel mundial en abuso sexual infantil con 5.4 millones de casos al año. (OCDE).
• Se calcula que 1 de cada 4 niñas y 1 de cada 6 niños, sufren violación antes de cumplir la mayoría de edad. (INEGI).
• La tasa de violación de niñas y niños en México es de 1,764 por cada 100,000. (INEGI).

Las cifras sobre abuso sexual infantil son muy desalentadoras, por lo que resulta necesario hacer visible este tipo de violencia que viven los niños en sus hogares, en las escuelas y calles. Asimismo es importante abordar este tema con los niños y niñas, primero se les debe hablar de  los nombres correctos de las partes privadas de su cuerpo y que nadie puede tocarlos, mencionarles por qué no deben guardar secretos y que siempre deben pedir ayuda cuando alguien los lastime.

Los adultos deben educarse para hablar de abuso sexual con sus hijos no solo para prevenirlo, sino para detectarlo y lo más importante asegurarse de hacerles saber que siempre creerán en su palabra. La confianza y la comunicación es vital para prevenir situaciones de abuso dentro y fuera de casa. 

Para Aldeas Infantiles SOS México es una prioridad la protección de niñas, niños y adolescentes, es por eso que estamos comprometidos a defender, alzar su voz y a promover los derechos de la niñez, colaborando y coordinando esfuerzos con organismos gubernamentales, la iniciativa privada, comunidades, familias y con la sociedad civil.

Escucha la voz de los niños, niñas y adolescentes que sufren o han sufrido abuso sexual en México. Con la firma de 10,000 personas, exigiremos presupuesto para la implementación de una política integral de prevención, para la atención y recuperación médica, psicológica y legal durante y después de los procesos de denuncia y para la homologación de códigos penales que permitan la regulación del abuso sexual infantil en todas las entidades.

Escucha su voz y firma para prevenir y ayudar a los niños que sufren de abuso sexual en México.

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