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Valentina llegó a la Aldea Infantil SOS Comitán cuando tenía un año de edad, desde entonces María del Carmen se encargó de cuidarla y quererla. Conforme el tiempo pasó se percató que su hija era muy retraída, por lo que decidió buscar apoyo médico y tras diversas valoraciones, le diagnosticaron autismo.

Tras el diagnóstico de Valentina, María del Carmen buscó terapias que le han permitido a su hija desarrollarse física y mentalmente. Fue difícil ya que Vale sólo interactuaba con su mamá, no permitía que nadie más se le acercará, pero el amor puede cambiarlo todo.

Su médico está sorprendido con su mejoría, pues Valentina ya logra articular más de 50 palabras, reconoce los colores, pronuncia las vocales, realiza actividades por sí misma como ir al baño.

El amor y cuidado de María del Carmen, ha sido una parte fundamental para el desarrollo de Valentina, juntas han construido un camino para una mejor calidad de vida.