julio 22 2011

Testimonio Mariana Taladrid

22/07/2011 Tehuacán, Puebla.- Aldeas infantiles es una organización internacional que se especializa en el cuidado de los niños proporcionándoles un crecimiento en un modelo familiar. Así, los niños crecen en una comunidad conformada por varios hogares en los que viven con sus hermanos biológicos al cuidado de una madre sustituta. El modelo de aldeas infantiles es sin duda el único que se aproxima a la creación de un entorno familiar.

Los menores de edad tienen derechos humanos descritos en la Constitución así como en diversos Tratados Internacionales. Sobra decir, que es responsabilidad del Estado garantizar en la máxima medida posible su supervivencia y desarrollo adecuado.

Desgraciadamente, una cantidad importante de menores de edad no tienen la oportunidad de crecer en una estructura familiar.  Por lo que el lazo afectivo es inexistente. Esto trae consecuencias graves en su conducta que llega a afectar al resto de la sociedad. De ahí, la importancia de conservar los modelos que cimientan seguridad, educación y pertenencia.

Los niños viven en sus hogares, están bajo el cuidado de una mujer que les brida el afecto y la paciencia de una madre, crecen con 8 niños de los cuales algunos son sus hermanos biológicos, en ciertos casos reciben visitas de sus familiares, van a la escuela, juegan en los jardines, salen de las instalaciones… en fin, verdaderamente llevan la vida de cualquier menor de edad.

El aspecto más valioso de haber tenido la oportunidad de convivir con ellos es admirar la sonrisa que permanentemente tienen en sus caras. Son niños que viven felices y que tuvieron la oportunidad de desarrollarse como tales. Tienen aspiraciones, metas y sueños sobre su futuro e incluso el de sus hermanos. En cierto sentido, insinúan que los problemas en la vida son situaciones pasajeras, y que siempre existe un porvenir alentador. Su percepción es sin duda una lección de vida.